Había una vez (y hay ahora) una niña hermosa llamada Felicitas, que con inmensa sabiduría, ternura y risas, me enseñó que la vida es bella y el mundo es hermoso, y me llevó de la mano hacia la luz, con destino a la felicidad.
miércoles, 8 de enero de 2014
Feli, como voy a estar lejos de vos durante un tiempo, y como sos mi persona favorita en todo el mundo, te pido que cuides a mis duendes y también a la abuelita. Te extraño cada segundo de cada minuto de cada hora de cada día, sos la luz de mi corazón y la belleza de mi vida, sos nada más y nada menos que Felicitas. Y Felicitas significa felicidad.
Te quiero con toda mi alma.
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